OT / Infraestructura Crítica

Este servicio se basa en atender las necesidades que nuestros clientes plantean en el ámbito de la seguridad en entornos operacionales (OT). La ciberseguridad industrial de estos tiempos cuenta con una particularidad especial: la integración de activos del entorno OT (Tecnología de las Operaciones) y de activos TI (Tecnologías de la Información).

El servicio está diseñado para proteger sistemas industriales y redes críticas frente a amenazas cibernéticas, garantizando la continuidad operativa, la seguridad física y el cumplimiento regulatorio. Este servicio se enfoca en entornos donde convergen TI (Tecnologías de la Información) y OT, incluyendo industrias como energía, transporte, manufactura, agua y telecomunicaciones. Se destacan los siguientes aspectos:

Evaluación de riesgos en OT: Identificación de vulnerabilidades y análisis de amenazas específicas para sistemas SCADA, PLCs y otras tecnologías operativas.
Segmentación y diseño de red segura: Recomendaciones sobre arquitecturas de red que separen los entornos IT y OT para reducir riesgos de propagación de amenazas.
Monitoreo continuo: Uso de herramientas avanzadas para detectar anomalías y ataques en tiempo real.
Resiliencia cibernética: Desarrollo de planes de respuesta a incidentes y recuperación diseñados específicamente para entornos industriales.
Gestión de parches: Estrategias para actualizar sistemas operativos y dispositivos sin interrumpir la operación.
Cumplimiento normativo: Alineación con estándares como NERC-CIP, ISA/IEC 62443, y regulaciones locales de infraestructura crítica.
Concientización y capacitación: Entrenamiento a operadores y técnicos en prácticas de seguridad específicas para OT.
Pruebas de penetración y simulacros: Evaluaciones prácticas para medir la seguridad y preparar respuestas efectivas.

Beneficios para el Cliente

Continuidad operativa: Minimizar interrupciones en los procesos industriales críticos debido a ciberataques.
Reducción de riesgos: Identificación y mitigación de vulnerabilidades específicas de OT, garantizando la protección de activos clave.
Protección física y digital: Salvaguardar los sistemas tecnológicos como la seguridad de los trabajadores y el entorno físico.
Cumplimiento regulatorio: Apoyo con aspectos normativos relacionados con la infraestructura crítica.
Visibilidad ampliada: Contar con un panorama integral sobre el estado de seguridad de los entornos OT y las posibles amenazas.
Respuesta proactiva: Detección y mitigación de amenazas gracias a sistemas de monitoreo avanzado.
Mejor colaboración entre IT y OT: Facilitar la convergencia entre ambos entornos, garantizando prácticas de seguridad consistentes.
Aspectos reputacionales: Prevenir incidentes que puedan afectar la confianza de clientes, reguladores y socios.
Optimización de recursos: Estrategias de seguridad adaptadas al entorno OT sin interrumpir ni afectar la producción.